Acerca del concepto «distancia social»
Sartre Criollo
Recién agarré «la colita» de la conferencia de prensa del Gobernador de Nueva York, quien de manera pausada, pero con mucho aplomo, explica lo que es de su competencia explicar a los habitantes del Estado, pero en forma tal que lo explicado tiene un alcance universal, descontando las particularidades de cada localidad.
Al tiempo que hablaba el Gobernador, el Congreso de Estados Unidos sigue intentando pasar un paquete económico que pueda ayudar a la sociedad norteamericana a sortear o mitigar el impacto de la pandemia.
El Gobernador, con una diapositiva de fondo, explicó el concepto de «Socially distanced, Spiritually connected». Una expresión sencilla que posiblemente resuma lo que de aquí en adelante es «la nueva realidad «.
Un reto de esta magnitud nos impone responsabilidades individuales y colectivas. La primera responsabilidad, paradójicamente, a pesar de que es con uno mismo, es la mejor contribución al colectivo.
La suma de las responsabilidades individuales es la mejor «vacuna» para la sobrevivencia del colectivo. Y cuando a lo individual y colectivo se suma la acción de los Estados como agregados, las posibilidades comunitarias de reducir el impacto devastador de la pandemia se multiplican.
La carrera contra el reloj es lograr que la capacidad exponencial de la pandemia para causar daño, tenga como contrapartida la respuesta sincronizada de individuos, colectivos y Estados.
Tal vez eso no me va a salvar a mí como individuo, pero aumenta los chances colectivos de la especie a la que todos pertenecemos.