El Danto 2021: plan de guerra de un régimen contra su pueblo.
Rodrigo Ibarra
El autor es militante obrero en San Francisco, California.
La guerra de Ortega contra los nicaragüenses
El Danto 2021 es la respuesta coyuntural de la dictadura en esta fase de la crisis; se trata de un plan para tiempos de guerra, que actualiza el que fuera puesto en marcha por la primera dictadura sandinista en los años 1980; incluye un plan de captura de políticos: han preparado una lista detallada de ciudadanos a ser encarcelados, que va desde “los grandes” [como se ha visto en los últimos días], hasta militantes menos conocidos en los barrios pobres. Es decir que mientras los militantes de la UNAB en los territorios se registraban y preparaban para defender el voto en unas hipotéticas elecciones, la dictadura los registraba y vigilaba como enemigos de guerra, y se preparaba para tratarlos como tales.
El plan de represión es muy vasto. Las listas son usadas por las fuerzas policiales en tranques que montan en las entradas a las ciudades, para interceptarlos en el tránsito entre una y otra. Además, podría esperarse que el Estado Mayor, funcionando en el Carmen, haya planeado acciones militares encubiertas de distracción, acciones de provocación, y asesinatos de militantes seleccionados porque la dictadura los considera “los más peligrosos”.
El peligro de caer en la provocación de Ortega
El aplastamiento de todas las libertades democráticas, de todos los derechos cívicos, podría exacerbar las tensiones y la frustración a tal punto que –como ha ocurrido tantas veces en nuestra historia– un sector de vanguardia, en este caso entre la juventud que se movilizó en 2018, intentara aventurarse en el corto plazo a la lucha armada.
En las condiciones actuales, este esfuerzo sería de alcance sumamente limitado, e inútil, y podría tener dos consecuencias muy negativas para la lucha. Por un lado, caería como anillo al dedo a los planes del Estado Mayor de El Carmen, que planea asesinatos selectivos. Se convertiría así en una acción provocadora muy conveniente y oportuna para las maquinaciones criminales de Ortega y Murillo. Por otro lado, también sería inconveniente para la lucha diplomática contra la dictadura. En momentos en que esta, por reprimir a los precandidatos presidenciales, se ha echado encima a toda la comunidad internacional, Ortega usaría una acción militar en su contra como justificación de todo el plan de guerra contra el pueblo que su régimen ha elaborado.