¡Libertad para Monseñor Álvarez, Libertad para Nicaragua!
Para los Nicaragüenses Libres, el más reciente atropello de la dictadura, al invadir ilegalmente la Curia de Matagalpa y capturar como si fueran criminales a Monseñor Álvarez, sacerdotes de su diócesis y acompañantes laicos, no es sorpresa. Es un hecho aberrante, sin duda, e intolerable. Pero calza en la lógica de la pandilla criminal de El Carmen y sus aliados: silenciar enteramente al pueblo, para consolidar su opresión sobre el pueblo, para hacerla indefinida, y con sucesión dinástica. En su marcha hacia el totalitarismo aplastan toda expresión de libertad, quieren amordazar a todos los individuos e instituciones que defiendan los derechos inalienables que como seres humanos tienen los nicaragüenses.
Hoy es Monseñor Álvarez, ayer fue Monseñor Báez, cientos de presos políticos, cientos de miles de exilados, más de 1500 organizaciones de la sociedad civil, decenas de emisoras de radio expropiadas. Para quienes todavía creen en “diálogo” con una tiranía así, y para quienes creen que si no manifiestan su disgusto con el régimen van a pasar desapercibidos por la represión, todo esto debe llevarlos a la pregunta: ¿Quién será la siguiente víctima de una dictadura enloquecida por la desesperación, acorralada por el 90%? ¿Irá ahora el monstruo contra las iglesias evangélicas? ¿Terminará expropiando a los grandes socios comerciales que la han construido y apoyado? Nadie está a salvo del monstruo. Esta debe ser un momento de reflexión para todos. Este momento es doloroso, y el camino hacia la libertad requiere que lo convirtamos en un momento costoso para la dictadura. Este no es el fin de la Resistencia, POR EL CONTRARIO, la RESISTENCIA SE FORTALECE porque, al exhibir su brutalidad y su totalitarismo, la dictadura nos empuja a cohesionarnos alrededor de las metas inevitables y básicas del pueblo: hay que DERROCAR al régimen y hay que FUNDAR un reemplazo que impida una nueva dictadura; es decir, hay que fundar una República Democrática. Es decir: no dejarnos engañar, no perder más el tiempo con espejismos de diálogo y elecciones con y bajo Ortega, sino trabajar en ORGANIZARNOS para que la FUERZA DEL 90% QUE SOMOS logre coordinarse, hacerles ingobernable el país, y sacarlos del poder utilizando todos los medios a nuestro alcance con astucia y con determinación democrática.
En lo inmediato, los Nicaragüenses Libres llamamos al pueblo de Nicaragua a: (1) organizarse en grupos pequeños de confianza para compartir la propaganda contra el régimen; tres o cuatro personas de confianza que lo hagan entre ellos, que cada uno convenza a otros de hacer lo mismo, que se transmitan por todos los medios la propaganda, la información, y las ideas de lucha que irán surgiendo del ingenio y la combatividad del pueblo; (2) llenar los templos, católicos y evangélicos, y apoyar a los sacerdotes y pastores que denuncian al régimen, a la vez que se reclama a quienes lo apoyan a desistir de su postura; (3) unirse a la movilización social, entendiendo por esta toda acción coordinada de masas, que puede incluir quedarse en casa, vaciar las calles, boicotear los negocios de la oligarquía cómplice y todos los negocios de serviles y sapos, desde Flor de Caña hasta las gasolineras sancionadas, hasta compañías de transporte como la del sicario Enrique Quiñones; (4) Llenar el país con la imagen de Monseñor Álvarez. Acompañamos este comunicado con la imagen digital, para que, quien pueda hacerlo guardando todas las medidas de seguridad, lo imprima en papel o calcomanía y lo deje en los lugares que pueda dejarlo o pegarlo. Somos, y seremos, Nicaragüenses Libres, y ninguna dictadura anacrónica de decrépitos, corruptos y cómplices podrá jamás arrancarnos el corazón libre y la conciencia limpia que es nuestra. ¡Unámonos!
[Somosnicaragüenseslibres@protonmail.com; en FB https://www.facebook.com/congresonicaslibres; los invitamos al programa Libertad, el Espacio de los Nicaragüenses Libres, Viernes 8 PM]
¡Que el rostro y el gesto de Monseñor Álvarez persiga a la dictadura hasta su tumba!
¡Unámonos en la acción coordinada, somos el 90%, hagámosle ingobernable el país!
¡Libertad Incondicional para todas las personas presas políticas!
¡La patria se respeta! ¡Abajo la dictadura criminal!
Monseñor Álvarez no está solo. Ni nuestros sacerdotes. No aplastarán a la Iglesia. No Aplastarán al pueblo. En medio de la oscuridad, el día viene.
Somos Nicaragüenses Libres | Somos el 90%
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¡Nicaragua será libre!
¡Alto a la agresión contra la Iglesia!
¡Libertad incondicional a nuestros presos!
Ellos creen ser eternos…Mas caerán.
“Ha contado Dios tu reino y le ha puesto fin.”