No basta con botar a Ortega: urge cambiar el sistema político-económico.
Manuel Fabien Aliana
RABIA: Tengo un tío sandía que sabe que trabajo para medios independientes pero que siempre me está enviando propaganda basura sandinista a mi WhatsApp. Tío, ya deje de enviarme imágenes como la que aquí muestro. No he disparado ningún arma en mi vida y no tengo la intención de hacerlo, así que tu belicismo lo podés guardar donde sea. Ustedes están en guerra contra un pueblo desarmado, y cada sandinista que apunte sus armas contra un joven indefenso tendrá que rendir cuentas ante un tribunal nacional o internacional en la NICARAGUA postorteguista.
ESCLARECER: cuando hablamos de justicia Transicional, no es porque queramos ser suaves o compasivos con los asesinos. Justicia Transcional es un proceso excepcional, público y transitorio que se enfoca en la verdad, justicia y reparación (moral y material) para garantizar la memoria nacional y la no repetición, pero que no exime de las penas de cárcel máxima a los violadores de derechos humanos (hermanos Ortega, Murillo, Áviles, Pellas y más (sí, los Pellas, por financiar la máquina de muerte y oxigenar el régimen). Los máximos responsables deberán pagar las penas máximas y no pueden ser amnistiados. Hay que romper con la maldición de una vez.
RECORDATORIO: En 1979 comenzó una nueva pesadilla. Los sandinistas, que engañaron a la población diciendo que su lucha era por la democracia, plagiaron el modelo somocista de represión, vigilancia y muerte, y lo perfeccionaron. Hoy estamos ante un modelo político-económico que condena a la muerte o al exilio a toda nuestra juventud. No crean que los odio, sandinistas, ustedes no merecen ni nuestro odio.
AVISO: me vienen con eso de que la prensa recibió financiamiento para formar periodistas profesionales al servicio de la libertad de expresión yo les pregunto:
PREGUNTA RETÓRICA: ¿Y dónde putas están los millones venezolanos? ¿No era que ese dinero era PARA el pueblo? ¿Habrán terminado en sus medios de comunicación que nadie ve y que no sabemos cómo mantienen? Son unos ladrones, tienen a la mitad de la población de Nicaragua en estado de pobreza e indefensión, comiendo literalmente lo que pueda y para lo que les alcance, y ustedes hartándose carnes, licores y productos de importación, al igual que en los ochenta.
ANÉCDOTA: Mi papá, que lamentablemente también es sandía, me confesó una vez que le dolió en el alma ver a los cuadros sandinistas comprando exquisiteces en las tiendas diplomáticas, mientras que a él lo mandaban a ‘comer mierda’ en los departamentos, a cortar café cerca de las líneas de fuego a finales de los ochenta. ¿Cómo NICARAGUA pudo volver a votar por semejantes basuras? Quizás porque en cada elección solo competían por el poder las diferentes culturas autoritarias, en un sistema que, debemos recordarlo continuamente, es un sistema sandinista heredado de la guerra de los ochenta. Estamos en un sistema sandinista desde 1979. (1979-202?)
OCUPA INSS: Me duele Nicaragua desde 2013, cuando el régimen volvió a demostrar la violencia de la que era capaz, al desalojar con métodos mafiosos y pandilleros a ancianos y jóvenes que protestaban pacíficamente en #OcupaINSS . En ese momento, la población dejó pasar esa violación a los derechos humanos, la ignoró, la permitió, la olvidó. Esa permisividad la estamos todos pagando ocho años después. Toda permisividad ante una violación a los derechos humanos es garantía de que esa violación volverá a repetirse en forma más violenta en el futuro. Los jóvenes y los ancianos parecen ser las víctimas predilectas del régimen.
EL PROBLEMA ES EL SISTEMA: No más sandinismo para Nicaragua. Acabemos con esa pesadilla que se consolidó en 1980. No podemos vivir y convivir en un sistema autoritario que se consolidó a través de las múltiples y continuas violaciones a los derechos humanos, políticos y cívicos. Nuestra Constitución nace de un contexto autoritario y no garantiza nuestros derechos. Por más modificada que haya sido y por perfectas que parezcan las leyes, todo está viciado, y ningún derecho está garantizado.
RESISTENCIA CÍVICA: Mientras no haya comunidad de ideas, mientras no haya redes suficientemente amplias ni liderazgos confiables, de nada sirve que salgamos a la calle. No nos expongamos a que nos maten, es lo que ellos están buscando. Lo único que saben es matar niños, jóvenes y ancianos y violar mujeres. Reflexionemos, cuestionémonos, mirémonos al espejo y preguntémonos qué hemos hecho mal para estar en la situación en la que nos encontramos. Y si algún liderazgo, de los muchos que hay Nicaragua hoy, llegara a entender que el problema de nuestro país no solo es el Frente sino que es todo ese maldito sistema político-económico que construyó el Frente, si ese liderazgo tuviera la voluntad y la capacidad de luchar contra el monstruo, entonces me pondré del lado de ese liderazgo.