Monseñor Abelardo Mata, obispo de Estelí:
“La lucha Noviolenta puede triunfar; es posible enfrentar al asesino en la república.”

Revista Abril conversa con monseñor Abelardo Mata, obispo de Estelí, sobre temas urgentes,desde el atentado contra la catedral de Managua, hasta el papel del Vaticano en el proceso político.


Algunos aspectos de la entrevista que vale la pena destacar:

Sobre el atentado contra la Sangre de Cristo en la catedral de Managua

Detrás de la agresión contra los símbolos sagrados de la Iglesia en Nicaragua no solo está la prepotencia de un régimen que se cree absoluto, sino una corriente mundial hostil a la dimensión espiritual (“la presencia de Dios en la historia”) que la iglesia católica, aunque no solo la católica, representan.

Sobre los liderazgos políticos actuales

“Los llamados ‘líderes políticos’ son muy responsable de lo que está pasando a la patria y de que gente indigna esté aprovechando para destruir esta nación”.

Sobre el miedo como instrumento de control de la dictadura

Para superar el miedo individual, que favorece a la dictadura: “trabajo en equipo”. “Los cambios se pueden dar si al pueblo se le educa, se le acompaña, si el pueblo siente que no está solo”.  “El proceso de educación permanente de un pueblo, no solamente la formal, sino también la informal…va a permitir los cambios.”

“No quieren un pueblo pensante, quieren un pueblo borrego, que ejecute lo que dice el líder de turno.”

Sobre la Noviolencia

“Hay que formar un nuevo liderazgo… hay mucha inquietud para ir estructurando un nuevo modelo de hacer política en la república…”

Hablando de cuánto tardan los procesos de cambio (“una generación”, dice): “me ha llamado mucho la atención cómo los hijos de esta gente que se decía revolucionaria y luego mamó del capitalismo, y siguen mamando, son los que han empujado [la lucha]… que ya había empezado el campesinado desde que comenzó la protesta de este contra el canal que les querían imponer a troche y moche…” 

“Los campesinos y la juventud son caldo de cultivo para una verdadera revolución, del regreso del hombre al corazón profundo del hombre, y no solamente a la periferia del hombre (cómo conquistar un trabajo, como tener mi casa, mi carro, buena ropa…) sino pensar como nación, como comunidad…”

Sobre el diálogo

“Dije desde el comienzo, en una conferencia de prensa, que mientras Ortega estuviera en el poder era imposible hacer los cambios, pero que había que mantenerse firme en las demandas contra los abusos del poder, y también en las ilegitimidades de origen del régimen”… “esta es la lucha que la razón demanda para evitar caer otra vez en nuevas oleadas de sangre para volver a comenzar la historia con nuevos líderes que al cabo del tiempo terminan envenenados por el poder porque se sienten poderosos con el arma…” 

Sobre por qué la Conferencia Episcopal se negó a participar en el segundo diálogo

“Al segundo diálogo, organizado por los capitalistas… dijimos como Conferencia Episcopal que no, porque sabemos que son puras mañas, subterfugios, artilugios de gente que no quiere diálogo… “

“…no es posible ir a un diálogo, mucho menos a elecciones si no dan ‘esas señales’ (liberar a todos los presos políticos, desarmar a los paramilitares del régimen)…”

Sobre si los nicaragüenses podemos derrocar a la dictadura sin volver a la guerra 

“Hay capacidad… si otros pudieron, ¿por qué no nosotros?… y en regímenes, digamos, mucho más duros, más crueles… hablo del muro de Berlín, hablo de la Cortina de Hierro… ¿y cómo cayó?… a través de un pueblo que tomó conciencia de su dignidad… los cambios se dan si somos fieles a nosotros mismos, si somos tenaces y perseverantes, y no nos dejamos vencer…y eso es lo que más está temiendo el régimen de la iglesia católica, porque hemos mantenido siempre el mismo llamado a la conciencia…”

Sobre cómo superar el obstáculo de una oposición que dice “No se puede” a la Noviolencia, mientras dice “Si” a elecciones que legitiman un genocidio

“¡Cambiemos líderes! [de la oposición]… cambian las cabezas, cambian las ideas…empujemos un nuevo liderazgo, tratemos de acompañar a las nuevas cabezas que van surgiendo…” 

Sobre las sanciones

“Al Ejército hay que tocarlo, pronto, y fuerte… ya comenzaron…”

Sobre las continuas invocaciones a Dios de los políticos opositores, y sobre el Estado laico

“es cierto, los políticos opositores también manipulan la fe… el político no tiene que meterse en las cosas de la religión…

“… la separación de los ámbitos [religioso y político] es muy importante para poder encontrar la sinergia, la conjunción de esfuerzos para poder orientar al pueblo en dirección a su superación como seres humanos…”

Sobre la respuesta (insuficiente) del Papa frente al sufrimiento que la dictadura impone al pueblo y a su propia Iglesia en Nicaragua

“¿Convendrá que exista un Estado Vaticano?… Casaldáliga decía: estoy dispuesto a dar mi vida por Cristo, pero no por el Vaticano…”

“Hemos dicho lo mismo de otra manera: necesitamos una iglesia más pastoral y menos diplomática…”

“El Santo Padre nos da orientaciones concretas, por ejemplo, esta: dejen de  hablar a los líderes y hablen al pueblo, y eso es lo que hemos hecho… sin embargo, viene del mismo Vaticano, a través de la vía diplomática, otra posición que nos desconcierta, y por así decir, entorpece el proceso de posición ante un problema muy concreto que se vive en Nicaragua, como es la injusticia, la opresión y el abuso del poder…” 

“Tenemos que cambiar… [incluso] un lenguaje que hay que estar interpretando para saber qué es lo que se quiere decir…”